El refranero español es propio para referirnos a cada situación de la vida cotidiana. Una de estas citas es la conocida “La mujer del César no solo debe serlo, sino parecerlo”, o lo que es lo mismo, “Las apariencias importan…”.
Por ello, es importante que las comunidades de propietarios presten atención, no solamente a los aspectos funcionales, sino también a los estéticos. Está demostrado que un buen mantenimiento ayuda a la conservación, pero también que existe un efecto llamada, tanto en sentido positivo como negativo, de modo que el embellecimiento de las zonas comunes indirectamente ayuda a su cuidado por la mayor parte de los vecinos.
Algunas ideas para mejorar la apariencia de las comunidades pueden ser las siguientes:
- Emplear personal especializado para la limpieza de cada una de las áreas en función de sus características. Un ejemplo puede ser contactar con pulidores o con empresas de limpieza que tengan este servicio integrado. Los suelos lo agradecerán.
- Decoración. Emplear mobiliario decorativo en las zonas comunes ayuda a su embellecimiento. Hoy en día existen empresas profesionales de decoración corporativa que podrán aconsejar también sobre elementos y materiales más adecuados, más aún actualmente que la pandemia de la COVID-19 obliga a prestar especial atención a la seguridad sanitaria de las áreas compartidas.
- Plantas de interior. Podríamos incluirlo dentro del anterior punto dedicado a la decoración, pero por sus características completamente diferentes al mobiliario, se ha considerado que debía tener un especial protagonismo. El beneficio de las plantas más allá del estético ayudará a que tengamos una comunidad de propietarios más amable y agradable de disfrutar.
Obviamente, completar las anteriores sugerencias con un adecuado mantenimiento de la finca, una limpieza continua de la misma, e incluso una conserjería que realice su trabajo acompañado de una sonrisa, serán el complemento perfecto para que podamos estar orgullosos de la urbanización o edificio donde vivimos.