En unos días gran parte de la población comenzará sus vacaciones. La sociedad ha ido evolucionando, y aunque hoy gran parte de los ciudadanos disfrutan a lo largo del año de sus vacaciones, es en la época veraniega cuando las ciudades siguen quedándose “vacías”, por lo que anualmente por estas fechas son habituales las campañas institucionales dando consejos para minimizar el riesgo de sufrir una desagradable sorpresa durante nuestra ausencia.
Por lo anterior, no está de más recordar algunos de estas sugerencias para tener un verano seguro, si bien, en todo caso, siempre recomendamos estar atentos a los mensajes de los expertos como policía y las empresas de seguridad como las que puedes encontrar en Solucionaf, así como de otros profesionales presentes en el directorio igualmente importantes para mantener nuestra vivienda en adecuado estado de conservación y seguridad.
- Información: Limitar informar de nuestros planes veraniegos a nuestro círculo familiar y de confianza.
- Visibilidad: No dejar señales de que la vivienda esté desocupada, vaciar el buzón periódicamente.
- Contar con una empresa de servicios en nuestra Comunidad de vecinos cuyo personal (conserjería, limpieza, jardinería,…) sea estable y profesional en sus funciones, será una garantía adicional de confianza en la seguridad de la finca.
- Cerramientos: Comprobar que puertas y ventanas se encuentran bien cerradas. ¿Dudas en la seguridad de su puerta? Un buen cerrajero podrá solucionar gran parte de los problemas.
- Objetos de valor: No dejarlos a la vista y de fácil localización dentro de la vivienda. Disponer de fotografías o apuntados los números de serie si disponen del mismo.
- Suministros: Comprobar que luces y fontanería funcionan adecuadamente y el suministro queda cortado. Instalar temporizadores automáticos para encendido y apagado de luces puede ser una buena opción.
Igualmente, para disfrutar completamente de las vacaciones, nuestras precauciones deberán extenderse durante nuestro viaje y en el destino, para lo que no deberemos olvidar:
- Redes sociales: Toda precaución inicial se vuelve inútil si posteriormente empleamos nuestras redes sociales para difundir nuestra ausencia y presencia en otros destinos.
- Acceso internet: No emplear redes Wifi que no sean de confianza. Evitar las redes públicas especialmente para pagos y accesos a webs que requieran contraseña.
- Infancia: Identificarles con pulseras, apuntarles el número de teléfono, memorizar éste, no perderles de vista, evitar aglomeraciones,…
- Pertenencias: Tener siempre controlados maletas, bolso y cartera, incluido durante los momentos de embarque o chek-in en hoteles. Llevar a la piscina o playa únicamente lo imprescindible, dejando el resto adecuadamente guardado en cajas fuertes o consignas según su valor. Cámaras de fotos, móviles y dinero en efectivo, son objetivos principales de los amigos de lo ajeno.
En síntesis, no hay que “relajarse” para disfrutar de unas vacaciones relajadas.